Estos días tenia la nececidad de hacer mi pendrive un live USB de Linux para poder borrar una bendita carpeta corrompida desde Windows y que ni madres me dejaba borrarla (si ya lo se Linuxeros tranquilos). Así que tengo varias ISO de diferentes distros de Linux, agarré Ubuntu porque es la que más se usar y no me da problemas y al momento de hacer la Live USB cagué fuero no tenia mi programita para hacerlo. Asi que buscando entre los cientos de programas descargados que tengo no encontraba uno, me puse a google y lo encontré hasta mejorado. Bajé Lili «Linux Live USB Creator» para Windows y chau pichu. Lo instalás, lo corrés, elegis la ISO o desde un CD, le pones la opción de formateo, ocultar los archivos dentro de la USB (por si queres seguir usandola y gaurdar otras cosas no solo un SO) y también para hacerla virtual, osea te descarga VirtualBox lo instalas en la USB y tambien podes usarlo desde Windows jaja mortal.
Soporta muchísimas distros de Linux, ahora queda en que ustedes vean cual no (probado con Ubuntu, Xubunto 10.10 y OpenSuse 10.3.
Etiqueta: Linux
Windows, que mala fama te has hecho.
Como ahora tengo Debian 6 en esta PC desde la que escribo, no paro de encotrarle cosas interesantes.
Recién, a punto de instalar Wine, –la capa de compatibilidad con Windows para Linux, para poder instalar Adobe Photoshop ya que GIMP apesta por que Linux es una porquería– me encuentro con lo siguiente:
Wine no es Windows, no es mas que una pobre capa de compatibilidad autónoma que hace funcionar aplicaciones «enjauladas» como si se tratara de una jaula chroot, un sandbox o el disco rígido de una máquina virtual. La posibilidad de que un virus se salga de esta jaula es cero y si se saliera, nunca podría infectar un sistema operativo Linux. Aún así, se me recomienda como paquetes sugeridos para instalar junto con Wine:
- avscan – Un antivirus
- klamav – El frontend para KDE de otro antivirus.
- clamav – Otro antivirus, que casualidad.
Windows, tu mala fama no conoce fronteras, ¡Atravieza inclusive la capa de compatibilidad con Linux!
IPCop Firewall. Si también uso Linux!!!!
FIREWALL
La seguridad es el punto principal del uso de un Firewall, sin tomar en cuenta el tipo de usuario. Los administradores de Red tienen que incrementar la seguridad todo lo que sea posible, para frenar todo tipo de software malicioso y ataques externos a nuestra red, por eso se implementa un Firewall. Para evitar problemas al momento de implementar un Firewall se necesitan seguir al pié de la letra las políticas de seguridad interna de la empresa a la cual se le coloque un Firewall.
Un Firewall es un cortafuego utilizado en redes de computadoras para controlar las comunicaciones, permitiéndolas o prohibiéndolas. Se localiza entre una red local y una red de internet como dispositivo de seguridad. Recordar que los Firewall pueden ser Software como IPCOP o Hardware.
IPCOP
IPCOP es una distribución de Linux gratuita de administración de cortafuegos que se instala en una PC permitiendo la implementación de diferentes tipos de topologías de Red como LAN, WAN, Wireless.
Las zonas o topologías son las siguientes.
Roja: Zona de internet.
Verde: Red de Área Local cableada (WAN).
Naranja: Zona desmilitarizada (Servidores)
Azul: Zona inalámbrica.
Y llegó el glorioso día…
O de como nunca hay que decir nunca…
Eso, de la muerte, los impuestos y los cuernos no se salva nadie dicen. Le voy a agregar una vuelta mas a la rosca:
Entre los usuarios de Linux, del rm -fr no se salva nadie.

Houston, tenemos un problema. Frase proferida por el astronauta Jack Swigert durante el accidentado viaje del Apolo 13.
Por eso algunos maricones dicen que no hay que ir por la vida logueándose como root, por que las cagadas son bien grandes. Pero no, yo por pecar de exceso de autoestima y pelo en pecho o simplemente para sentir la adrenalina en las venas de vez en cuando ya que no practico ningún deporte de riesgo –en realidad no practico ningún deporte ¿Correr desde la puerta de un banco al otro no cuenta, no?– siempre que ando ejecutando comandos desde la consola tengo un signo « # « en el command prompt. Siempre voy como root y nunca me pasó nada. Por que soy macho y me la aguanto.
Así que allí estabamos, mi exceso de testosterona y yo, en uno de esos días en los que podés decir «he tenido días mejores», pensado en 25 cosas simultaneamente y contra reloj copiando un directorio tras otro, desde una ubicación a la otra, con el # adelante:
- cp dir1 dir2/
- cp dir2 dir2/
- cp dir3 dir2/
Y así sucesivamente. Con la prisa, recuperando con las flechas de cursor los últimos comandos tipeados para poder modificar únicamente el nombre del directorio de origen y evitarme tipear el resto, hasta que en una de esas, me pasé de largo…
El comando inmediato anterior que bash tenía almacenado antes de que empezara a ejecutar la orden cp para copiar era un rm -fr, con lo que muy pancho, casi sin mirar la pantalla ejecuté:
rm -fr dir4 dir2/
Y demoraba, y demoraba… Y yo estaba mientras pensando en mil cosas y haciendo un par de cosas mas a la vez, y el asunto seguía demorando mas de la cuenta…
Todo el proceso de copia debería haber demorado no mas de diez segundos pero esto ya llevaba cerca de un minuto. Entonces, en una fracción de segundo que me quedará marcada a fuego en la memoria, miré el led de actividad del disco rígido: 100% encendido, ni parpadeaba… Miré a continuación la pantalla, leí lo que había tipeado, leí los argumentos, piel de gallina en todo el cuerpo, frío desde la nuca hasta la cintura, CTRL + C para cancelar la operación.
… El CTRL + C mas rápido del oeste…
Ya era demasiado tarde… De una partición que contenía 300Gb de datos, me llevé al garete casi 110. Y eran de un servidor. Peor aún, de un servidor mío. Para embarrarla mas: De un servidor en producción, y para ponerle la guinda al postre, sin copia de seguridad.
Alguna vez me tenía que pasar. En toda la pila de años que llevo usando Linux, esta fué la primera por suerte pero me dolió y en forma, cosa que me sirvió para aprender un único precepto:
Si estás tipeando comandos como root, no importa cuán seguro de vos mismo estés, ni cuan relajado o enfrascado, ni cuan grandes tengas las pelotas, ni cuán mutitarea por prioridades y en tiempo real tu cerebro sea capaz de funcionar, tres carajos: Toda la potencia de procesamiento cerebral dedicada exclusivamenta a lo mas importante del mundo, Prestar atención a lo que escribís en la pantalla.